Comunicado de prensa | 28 Ene, 2013

Dunas y espartales, ecosistemas vivos del mediterráneo

La UICN presenta dos nuevas publicaciones sobre dunas y espartales que contribuyen a un mejor conocimiento del funcionamiento de estos ecosistemas vitales para la región mediterránea.

Tras meses de trabajo en equipo y con expertos de ambas orillas del mediterráneo el Centro de Cooperación del Mediterráneo de UICN (UICN-Med) presenta dos publicaciones sobre dunas y espartales que tienen por objetivo contribuir a un mejor conocimiento del funcionamiento de estos ecosistemas y proporcionar recomendaciones para su restauración y gestión sostenible.

El trabajo ha sido fruto de la colaboración entre la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y UICN-Med para implementar acciones que promuevan el desarrollo sostenible y el uso eficiente de los recursos naturales en la región mediterránea y en particular en el Norte de África.

Los ecosistemas dunares cumplen un papel vital en la protección del litoral y prevención de los riesgos causados por la elevación del nivel del mar ante el cambio climático. Su recuperación y conservación permiten aumentar la resiliencia y adaptación de estos ecosistemas costeros al cambio climático y contribuyen a la fijación de nuestras playas, recursos esenciales para el turismo.

Los espartales constituyen uno de los ecosistemas más representativos de las zonas semiáridas de la cuenca mediterránea. Estas comunidades han sido utilizadas por los humanos desde hace miles de años, tanto para la recolección del esparto y uso de su valiosa fibra, como para el pastoreo, entre otros muchos usos. Su preservación y recuperación contribuyen a frenar la erosión de los suelos y luchar contra la desertificación, así como fomentar el desarrollo rural, generar recursos económicos y fijar empleo local. El manual de esparto ha sido elaborado en colaboración con la Universidad de Alicante y el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo. Esta publicación está disponible en españolfrancés árabe.

“Confiamos que la difusión de estos conocimientos para su aplicación práctica en acciones de restauración contribuya a mejorar las condiciones de estos ecosistemas y, con ello, a proteger la biodiversidad y promover el bienestar humano” ha valorado Antonio Troya, director del Centro de Cooperación del Mediterráneo de UICN.

Ambas publicaciones están dirigidas principalmente a técnicos, gestores e investigadores de dunas costeras y estepas semiáridas del Mediterráneo occidental con el objetivo de proporcionarles un manual útil y práctico, con información sobre las experiencias y actuaciones más recientes que están permitiendo aumentar la resiliencia de estos ecosistemas.