Este espacio tuvo como objetivo fortalecer las capacidades del equipo técnico de SENAGUA en territorio, con el fin de mejorar los procesos de planificación y gestión sostenible de las cuencas hidrográficas. En este marco la UICN fomenta el enfoque ecosistémico, que reconoce las funciones de los ecosistemas y promueve la conservación de la biodiversidad y el uso justo, equitativo y sostenible de los recursos hídricos. 

El Ecuador está en un proceso importante de institucionalización y descentralización de la gestión del agua, los funcionarios en las demarcaciones hidrográficas jugarán un rol clave para la conformación de los Consejos de Cuenca y la elaboración de los Planes de GIRH por Cuenca. Este proceso será una oportunidad para alinear los esfuerzos de diferentes sectores y ordenar de mejor forma el uso y protección del recurso, así los Consejos de Cuenca serán una de las plataformas participativas para la planificación. Los planes GIRH son un instrumento esencial para fortalecer la gestión del recurso hídrico, fomentar la participación y empoderamiento de los usuarios, y articular a las diferentes instituciones que directa o indirectamente inciden en los procesos hidrológicos de una cuenca.

El taller juntó a los equipos técnicos de las nueve demarcaciones hidrográficas en la ciudad de Quito. Durante los tres días se revisaron criterios y orientaciones a considerar para la planificación. Junto con la Subsecretaría Social y de Articulación del Recurso Hídrico y los expertos de la cooperación francesa se preparó un documento guía que pudo ser revisado y retroalimentado con el equipo en territorio. En este espacio también se capacitó a los funcionarios sobre la importancia del enfoque integrado, y temas clave como: los procesos socio-ecológicos en una cuenca, la importancia de la participación, criterios para priorizar, gestión de la información, caudales ecológicos, hidro-morfología y dinámica fluvial, cambio climático, entre otros.      

La UICN a través del Proyecto BRIDGE promueve una mejor gobernanza del agua, fomenta la cooperación y la gestión sostenible de las cuencas bajo un enfoque ecosistémico. Los ecosistemas cumplen funciones esenciales en el ciclo hidrológico, regulan la cantidad y calidad del agua, y necesitan ser reconocidos de mejor forma en las políticas, estrategias, planes, y proyectos hídricos. Al mismo tiempo el desarrollo de infraestructura hídrica está causando serios impactos en las dinámicas de nuestros ríos, afectando procesos ecológicos clave para la biodiversidad acuática y vulnerando a las poblaciones que dependen de ellos para su subsistencia. Un cambio de visión en la forma de resolver los desafíos del agua es urgente, la tendencia actual, luego de décadas de errores,  es intervenir lo menos posible en los flujos naturales de agua, tratar de evitar las obras que interrumpen la dinámica fluvial y apoyarse en soluciones costo-efectivas, basadas en la naturaleza y en un mejor ordenamiento del territorio.